“¿Cuál sería el ideal común al cual deberíamos aspirar? Se trataría de que las mujeres y los hombres nos liberáramos de nuestros respectivos mandatos, y aprendiéramos a dudar, sin dejar de amar la verdad; a asentir con el mundo, sin renunciar a mejorarlo; a buscar el placer y reducir el sufrimiento de forma individual y colectiva; y a participar en la política, con entusiasmo, pero sin caer en el fanatismo. Sabemos que «lo ideal» significa «que no existe». Pero también sabemos que imaginar un mundo mejor sirve para movilizar las energías de lo posible. Pues como decía María Zambrano, sólo la proximidad lo hará posible”.
Anna Capdevila